Modelos económicos en las elecciones
http://www.desafioeconomico.com/book_2.php?id=3765
Frente PODEMOS
“Un cambio de fondo del modelo económico social“
Modelos económicos en las elecciones
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Frente PODEMOS
“Un cambio de fondo del modelo económico social“
Con el pago del medio aguinaldo, el paro de camioneros y la marcha del lunes 8 apoyada por la CTA, volvió al centro de la escena la tremenda injusticia que significa que los trabajadores tributemos el regresivo impuesto a la cuarta categoría sobre nuestros salarios. Sigue leyendo
Un congreso que fortalece la CTA
Delegaciones sindicales internacionales, adhesiones y una delegación de la CGT dieron el puntapié inicial al Congreso de la Central. Los mil delegados acreditados debatieron en un clima muy fraternal durante los días 11 y 12 de abril en costa Salguero. En ese marco de unidad, se consideraron distintas propuestas para fortalecer la organización, se lanzó una campaña por los Bienes Comunes y la convocatoria a un nuevo Paro Nacional para mayo. Sigue leyendo
En Túnez, cuna de la Primavera Árabe
Durante la semana del 24 al 31 de marzo, estuve representando a la CTA y a la CICOP en las actividades y deliberaciones de este evento que convocó a miles de activistas y organizaciones de diversos países. Más allá de los debates de actualidad, el viaje fue muy útil para articular con los actores de esos procesos revolucionarios en función del reagrupamiento mundial que se necesita. Sigue leyendo
El miércoles 14 miles de trabajadores salimos nuevamente a la calle, convocados por la CTA y la CGT. Esta vez, luego de realizar cortes en los accesos a la Capital, nos movilizamos al Ministerio de Trabajo.
Como se ve en Buenos Aires y las demás provincias, Cristina y los gobernadores no quieren escuchar nuestros reclamos. Ellos cuidan los negocios de los capitalistas y piensan en la campaña electoral. Por eso se necesita un nuevo Paro Nacional para pararles la mano. Hay condiciones por abajo para hacerlo y prepararlo.
Miles y miles en las calles. Temprano en los cortes, luego frente al Ministerio de Trabajo, los trabajadores volvimos a demostrar que no estamos dispuestos a pagar la crisis.
Mientras los compañeros de la CGT llegaban desde Belgrano y 9 de Julio, la columna encabezada por la CTA arrancó con fuerza en el Obelisco. No sólo el frente del ministerio, fueron varias cuadras completas las que ocupó la marcha. La unidad de acción volvió a marcar que justeza cuando se trata de enfrentar el ajuste.
Buenos Aires y demás provincias, adelantos de un modelo agotado
La convocatoria se hizo en un marco de luchas provinciales, encabezadas por docentes y estatales, con una expresión muy fuerte en la Provincia de Buenos Aires. Los distritos son el “eslabón débil” de un modelo que privilegia a las corporaciones mientras se destruye sistemáticamente lo que es de todos. Por eso, el año pasado en todas ellas se aprobaron presupuestos de achique y recortes a la salud, educación, cultura, etc., a la vez que se sostenían toda clase de ventajas impositivas para las grandes empresas.
Con la entrada de la crisis internacional y la reducción de las arcas nacionales, ha quedado a la vista para millones que este modelo con más de una década nunca resolvió los problemas del país y ahora, en su agotamiento pretende que de nuestros bolsillos se paguen los platos rotos.
Hay que entender estas crisis provinciales como un adelanto de lo que se va a venir en todo el país si continúa este modelo de entrega y saqueo.
Cristina y los gobernadores, socios en el ajuste
Como siempre ocurre cuando los problemas se hacen visibles, los de arriba se pasan la culpa unos a otros. Desde el año pasado, en Buenos Aires, Córdoba, Santa Cruz, Capital y demás distritos la rosada y los gobernadores se culparon mutuamente de aguinaldos no pagados, jubilaciones recortadas, crisis financieras, trabas en el servicio del subte, etc. Utilizando los medios, buscaron meternos a todos en sus disputas.
Ahora, en lugar de hacerse cargo, Cristina, Scioli, De la Sota, Peralta, Macri y demás gobernadores intentan el mismo recurso de pasarse la pelota. Lo cierto es que todas las administraciones, sean del signo que fueran, han sostenido este modelo desde que existe. Sin reparar en el saqueo y la entrega, el abandono del transporte y la destrucción de lo público. Y todos han definido medidas de ajuste sobre los salarios, las condiciones de trabajo y demás derechos de los trabajadores. Con milimétrica precisión, detrás de la pirotecnia electoral, votan juntos los presupuestos de ajuste.
Preparemos el Paro Nacional CTA-CGT
Mientras sale esta nota los docentes y estatales en gran parte del país siguen de pie. También se inician paritarias en otros gremios. Diez provincias con conflictos docentes, seis de salud, varias con los auxiliares de educación y los trabajadores administrativos en pie de lucha, demuestran que el déficit fiscal y las crisis provinciales dominan la escena. Pero el estancamiento económico, también coloca en situación de riesgo al sector privado.
Es evidente que ni el ministro ni la presidenta piensan atender las demandas, ceder el aumento general de salarios, garantizar paritarias libres, anular el impuesto al salario y universalizar las asignaciones, como puntos urgentes. Si hasta Caló, Yasky y demás aplaudidores se han quedado esperando anuncios que nunca llegaron ni llegarán.
El 20N fue el paso más importante de una unidad en la acción correcta. Y nos permitió colocar en la agenda nacional los reclamos de los trabajadores y otros sectores atacados por el modelo. Desde la Corriente Sindical del MST, estamos convencidos de que la actual situación plantea que se avance en la preparación de un Paro Nacional CTA-CGT.
No hay otro camino para torcer el rumbo que Cristina y los gobernadores vienen definiendo.
Se viene el Congreso Nacional y en las regionales de la Central. De allí tiene que salir la convocatoria al Paro y el llamado a la CGT para hacerlo en unidad.
Son millones los que quieren un cambio de rumbo.
La CTA puede seguir creciendo si los convoca con una propuesta de lucha a la altura de las circunstancias.
Alejandro Bodart, diputado porteño y candidato a diputado nacional:
¿Cuál es el panorama de cara a las elecciones en Capital y en el país?
Como ya lo dije en otras ocasiones, estamos ante una oportunidad enorme en la Ciudad de Buenos Aires. A diferencia de las elecciones anteriores, los dos oficialismos -el nacional y el porteño-, llegan más debilitados y eso abre la posibilidad de que una nueva herramienta llegue no solo a disputar sino a ganar en la Ciudad.
Y creo que el panorama nacional es similar aunque, a diferencia de Capital, en el resto del país todavía es más compleja la construcción de una herramienta alternativa. Porque en la Ciudad, la presencia de Pino y el Movimiento Proyecto Sur plantean la posibilidad de vertebrar alrededor de su candidatura a senador una gran herramienta para disputar.
La conflictividad social alimenta la posibilidad de dar un salto en el terreno político-electoral…
En el país desde el 2001 hay una combinación de luchas y de enfrentamiento muy importante a las políticas tanto de los gobiernos como de los dirigentes patronales. Es necesario tener una política para apoyar las luchas, centralizarlas y unificarlas, como también es necesario tener una política para elevar toda esa conflicti-vidad a un plano político.
Y las elecciones son muy importantes en ese sentido, porque difícilmente se podrá ir construyendo una acumulación política necesaria como para disputar poder, si junto a las luchas no vamos ganando un peso decisivo en el plano electoral. Esto es parte de los nuevos desafíos del Siglo XXI. Hay que entender la combinación entre luchas y procesos electorales al servicio de construir una alternativa que dispute, luego de un período, el poder.
Estas elecciones 2013 son muy importantes como bisagra hacia el 2015. Por lo tanto de lo que podamos lograr ahora va a depender también la posibilidad de que en el 2015 podamos disputar algunos distritos, e incluso, a nivel nacional.
La burguesía que va a intentar darle continuidad al proyecto kirchnerista, o bien oponerle al proyecto kirchnerista alguna variante parecida, como en su momento encarnó la Alianza, o la que encarnaba Menem. Aquí aparece el interrogante sobre si vamos a ser capaces, la izquierda, los sectores realmente progresistas, que peleamos por un cambio de fondo, de oponer una alternativa realmente transformadora frente a esas alternativas que quisiera la burguesía.
¿Cuál es la mejor herramienta para encarar esa disputa?
Bueno, en la Capital creo que hay que hacer un frente lo más amplio posible ya que vamos a enfrentar a los dos gobiernos. Por lo tanto, tienen recursos poderosos para dar la batalla en el plano electoral.
Ahora bien, si somos capaces de unirnos los que queremos realmente un cambio para la Ciudad… Porque, vuelvo a insistir que tampoco se trata de amontonar. Nosotros, por ejemplo, no vemos de ninguna manera el canto de sirenas de la UCR que permanentemente se ofrece como variante «progresista»…
Es unidad alrededor de un programa…
Exacto. Tiene que ser la unidad alrededor de un programa que tome las salidas de fondo para defender lo público, para defender la escuela, la salud, el espacio público, para apoyar a todos los que luchan por una transformación real de la Ciudad. Nos tenemos que unir todos los que opinamos, y los que no solo opinamos sino que hemos demostrado con hechos que estamos en eso. Ese es el desafío que tenemos. Por eso estamos llamando a construir una gran herramienta para disputar.
¿Cuáles son los sectores principales para conformar el frente que se necesita?
Nosotros creemos en primer lugar que es muy importante hacer extensivo el llamado a todas las fuerzas que componen el FAP. Dentro de ello principalmente a los compañeros de las fuerzas políticas referenciadas en la CTA encabezada por Pablo Micheli, como BAPT del diputado Lozano, porque creemos que tenemos un programa que hemos ido construyendo juntos en la calle, hemos logrado vertebrar unidad de acción con la CGT y otros sectores posibilitando el masivo paro del 20N y otras acciones importantes. Sería una desgracia que lo que venimos construyendo en la calle juntos en la CTA no podamos elevarlo al plano político.
Acá hay que vertebrar una unidad que parta desde el Movimiento Proyecto Sur, ya que sin lugar a dudas Pino es el candidato que está en mejores condiciones de encabezar esta construcción. Desarrollar una política unitaria hacia los componentes del FAP y otros sectores de la izquierda política y social, tener una política para otros sectores de la izquierda política y social, y estar abiertos a que pueda surgir otro tipo de fuerzas políticas que estén dispuestas a confluir y con las cuales nos podamos unir para hacer un gran frente.
En la prensa se menciona un relacionamiento con la Coalición Cívica de Carrió. ¿Qué hay de cierto?
Desde la prensa y desde algunos sectores han señalado que ya hemos acordado con Carrió y eso es equivocado. No existe ningún frente con ella. La fuerza que ha tomado la candidatura de Pino hace que las fuerzas políticas que no comulgan ni con el gobierno nacional ni con el gobierno de la Ciudad quieran conversar con nosotros. Nosotros vamos a conversar con todos. Para ver con quiénes tenemos coincidencias políticas y programáticas y con quiénes no. De antemano no vamos a excluir a nadie. En el caso concreto de Carrió somos concientes que así como en sus orígenes tuvo puntos de contacto con algunas de las propuestas que levantamos, y que es una abanderada en la pelea contra la corrupción, posiblemente por una incomprensión del fenómeno del kirchnerismo, fue girando hacia posiciones más contradictorias y conservadoras que no compartimos.
¿Es posible lograr esta amplia unidad con todos estos sectores?
Yo creo que sí. Se necesita por un lado la grandeza de entender que acá hace falta una fuerza para ganar la ciudad. No se trata de hacer una fuerza para ir acumulando en su pequeño nicho. Creo que están dadas las condiciones para cambiar.
En el mundo hay un proceso de transformaciones. En muchos lugares están surgiendo fuerzas que pueden ser alternativa de gobierno para un distrito o incluso para un país. Tenemos el ejemplo en Grecia, con Syriza. Y es muy importante que crezcan electoralmente fuerzas transfor-madoras para aportar al proceso de conjunto.
Entonces, creo que sería una tragedia que no podamos articular entre todos para salir bien parados de esta campaña, lo que nos posibilitaría por un lado estar disputando en el 2015 el gobierno de la Ciudad. Y también, si salimos con Pino senador de esta elección, se abrirían las posibilidades de aportar a Pino al escenario nacional de cara a construir la herramienta que hace falta en el país.
Para articular todo, si el problema son las candidaturas, nosotros creemos que hay que buscar un mecanismo democrático y que pueden ser las mismas PASO (internas abiertas obligatorias) para resolver. Si nos ponemos de acuerdo en un programa, que es lo central, lo de las candidaturas no puede ser un problema. O avanzamos vía un acuerdo, o tenemos la opción de competir en las PASO y que las listas se armen proporcionalmente. Creo que esa es una oportunidad que da la realidad. Tenemos que entender que las PASO ahora son parte de la realidad del país. La elección ya no es en octubre, en realidad es en agosto. Las PASO son un mecanismo que puede ser utilizado al servicio de unir y no dejar que sólo lo utilicen las variantes del régimen para dirimir sus candidaturas y salir más fuertes a la batalla electoral.
¿Cuáles son los próximos pasos?
Bueno, nosotros estamos haciendo una serie de reuniones con todas las fuerzas. Estamos llamando a que en el curso de este mes lleguemos a puntos mínimos de acuerdo y también a mecanismos para resolver la integración. Porque tendríamos que entrar ya en abril con una propuesta unificada para ganar las calles.
Vuelvo a insistir: tenemos que ser capaces de construir -o por lo menos ese es el objetivo que tenemos junto a Pino, desde el Movimiento Proyecto Sur- una herramienta que sea capaz de disputar de igual a igual con los viejos partidos. Nos tiramos a ganar la Ciudad en esta elección, y a salir posicionados para la Capital y para el país en el 2015.
Mientras más rápido avancemos en estas cuestiones, mejor vamos a estar para salir con la mayor fuerza a la batalla electoral.
Entrevistó: G. P.
Mientras en los discursos se esconden los problemas estructurales del modelo K, desde la rosada se ha definido descargar la crisis sobre las espaldas del pueblo trabajador. Aumentos en los impuestos, tarifazos, presupuestos recortados. Mientras se le paga a los fondos buitres, se proponen techos salariales y se cierran paritarias por decreto.
La política de ajuste, encabezada por el gobierno nacional y replicada por todos los gobernadores, viene siendo enfrentada por paros, cortes y movilizaciones de los trabajadores y organizaciones sociales en todo el país. Podría ser más grande la protesta, de no ser por la actitud de Caló, Yasky y demás dirigentes cristinistas.
El miércoles 14, la CTA convoca a movilizarse al Ministerio de Trabajo. La CGT se ha sumado a la propuesta.
Desde la Corrientes Sindical del MST llamamos a los docentes y estatales que luchan en la provincia de Buenos Aires y en el resto del país; a los trabajadores de la industria y el comercio; a los que han sido abandonados por los dirigentes vendidos; a los jubilados; movimientos sociales; a la juventud. Todos tenemos que estar en la calle, unidos, ese día. Seamos miles frente al Ministerio de Trabajo y hagamos movilizaciones en las demás provincias. Esta movilización es una oportunidad de volver a poner sobre la mesa los reclamos de los trabajadores.
Desde ahora, tenemos que debatir en nuestros lugares de trabajo, en los sindicatos, agrupaciones, etc., la continuidad de esta movilización. Hay bronca suficiente para construir un Paro Nacional y poner en pie un Plan de Lucha que pueda derrotar la política de ajuste de los gobiernos.
El actual momento nos demanda ir por ese camino, plantándonos con fuerza y luchando por un modelo de emergencia, basado en las necesidades de los trabajadores y el pueblo.
La inflación en enero se ubicó entre un 2,6 y un 2,9%. Con las proyecciones de un 33,4% para los sectores más pobres según la Universidad Di Tella, el gobierno anunció un nuevo verso: «el control de precios».
Pasadas ya varias semanas de su pomposo anuncio quedo en claro que la Secretaría de Comercio no controla nada y que los precios siguen subiendo… pese a los «esfuerzos» de Moreno. Esta semana el gobierno de Mendoza, a través de su Dirección de Defensa del Consumidor, informó que hay aumentos en 47 productos de la canasta básica. Y un reciente estudio en manos del propio gobierno, reveló cómo el 70% de los precios ofrecidos por «la lista» no coincide con la realidad; los productos encontrados cuestan hasta cinco veces más. Sin embargo, vuelven a la caradurez de explicarnos que se puede comer con $ 6 por día.
Y si ahora que hay «control y congelamiento» estamos así…muchos se preguntaran que pasará cuando lleguemos al día 61, este 1º de abril. Lo cierto es que el tope del 20% que este gobierno pretende imponerle a las paritarias, como la escandalosa propuesta del 22% a los docentes dividida en 3 cuotas, son una clara muestra de que el control K de los precios, es una burda maniobra para impedir que los trabajadores actualicen sus sueldos, que los jubilados reclamen por un verdadero aumento y se despidan definitivamente del 82%, los desocupados por la actualización de sus programas al nivel de la inflación real, mientras millones de trabajadores sigan pagando «ganancias» y otros tantos pierden el salario familiar.
El cóctel explosivo de inflación y ajuste les ha restado margen de maniobra a la corte de bufones que se postuló como pata sindical de los K. Antonio Caló y sus muchachos de la CGT Balcarce, tuvieron que salir a despegarse, criticar el acuerdo de precios y decir »que la inflación es el impuesto que más perjudica a los trabajadores». Y en el territorio de Yasky y la burocracia docente, la desazón es mayúscula. No es para menos en un país donde no empiezan las clases, donde docentes y estatales ya tienen paros de alcance nacional programados para el 25, y donde el resto de los trabajadores van a seguir sus pasos si pretenden seguir achicando sus ingresos.
La gravedad de la situación se expresa en los trascendidos de las discusiones entre gobierno y empresarios sobre si hay que aceptar el desdoblamiento cambiario propuesto por Kicillof (una devaluación «sustentable») o lanzar una mega devaluación y cambiar la moneda para estabilizar la situación en este año electoral. Todas estas medidas constituirían duros golpes al pueblo trabajador.
En este contexto, la movilización del 15 de marzo, convocada por la CTA y a la que se ha sumado la CGT representa una oportunidad muy importante expresar nuestro rechazo a este modelo de inflación y ajuste. Tenemos que ser miles frente al Ministerio de Trabajo de la Nación y en los de cada provincia. Y pelear por otro modelo.
El control de precios es una burla: Basta de inflación
1. Un inmediato y real congelamiento de precios controlado por las organizaciones populares y con la aplicación de la ley de Abastecimiento para aquellos empresarios que intenten desabastecer.
2. Aumento general de salarios. Paritarias libres e indexación mensual del salario. Aumento de los mínimos salariales, jubilatorios y de planes sociales a $ 5.000-
3. Eliminación del IVA a los productos de la canasta básica. Anulación del impuesto al salario. Reforma impositiva progresiva con fuertes gravámenes para las grandes empresas y multinacionales. Restitución de los montos históricos de los aportes patronales y eliminación de los topes para cobrar el salario familiar.
4. Inmediata suspensión de los pagos de la fraudulenta deuda externa y con ese dinero lanzar un plan de reactivación y obras de infraestructura necesarias para reactivar la economía popular.